La lluvia nos regó los caminos una horas antes, nos respetó la salida, el grupo compacto hasta el final en que el camino Madrid removió el gallinero como de costumbre, llegamos a una buena hora al punto de avituallamiento y para culminar la noche el mago Vicente nos deleitó como nos tiene acostumbrados, ahí van algunas fotos.
Que paséis un estupendo mes de agosto, y en Septiembre a reanudar la marcha, no entrenéis mucho...